Cuando nos enfrentamos a un proyecto de desarrollo de una página web o blog, tan importante como el diseño o la programación, es la creación de un contenido relevante y optimizado que sea atractivo para usuarios y buscadores.
Debemos ser conscientes de la doble función que ha de cumplir el texto mostrado en nuestro site. Por una parte, proporcionaremos información útil, valiosa y contrastada a nuestros lectores. Pero este objetivo hay que compatibilizarlo con la segunda meta, crear contenido atractivo ojos de los buscadores.
Para ello tendremos en cuenta diferentes consideraciones que nos ayudarán a cubrir las necesidades de esta doble vertiente: Usuarios y motores de búsqueda.
1.- Evitar, en todo caso, el contenido duplicado. Como ya hemos comentado en anteriores entradas, Google, Bing y Yahoo penalizan los textos copiados o muy similares. Por lo tanto, a la hora de redactar, aunque tengamos en cuenta diversas informaciones, no podemos limitarnos a transcribir y realizar ligeras modificaciones.
Además, es recomendable que esta información sea de calidad para que pueda servir a otros internautas, favoreciendo el desarrollo de un conocimiento colectivo.
2.- Investigación sobre la materia y analizar a la competencia. Durante este proceso nos familiarizaremos con la terminología del tema a tratar, las tendencias actuales, novedades y acontecimientos destacados. A lo largo del mismo, obtendremos multitud de ideas de palabras clave y analizaremos la situación de la competencia y el contexto en general, lo que nos servirá de gran apoyo para ponernos en disposición de escribir con propiedad.
3.- ¿Qué queremos destacar? Tanto en la Home como en cada sección o categoría definiremos objetivos, es decir, delimitaremos qué es lo más importante en esa página. Dicho de otra forma, para cada apartado desarrollaremos textos optimizados que lo describan, evitando repeticiones de keywords, porque, no olvidemos, los textos son leídos también por humanos.
4.- Búsqueda de Keywords. Relacionado con los dos puntos anteriores, llega el momento de elegir qué palabras clave utilizaremos para la optimización. En primer lugar, y tras el análisis explicado en el punto 2, confeccionaremos listas palabras para cada sección o categoría, tratando de buscar términos que definan lo que allí se muestra.
A continuación, comprobaremos su volumen de búsquedas y competencia ayudándonos de la herramienta de palabras clave de Adwords o similar, tratando de apostar por aquéllas con mayor número de consultas y que sean acordes con el producto/servicio/información objetivo.
5.- Estructura y redacción. Ahora ya estamos en disposición de redactar el contenido. La estructura debe contar con título H1 claro y, preferiblemente, con no más de 5-7 palabras.
El primer párrafo es clave. Con una extensión máxima aproximada de 250 caracteres, en él insertaremos las 2 ó 3 keywords principales que hayamos elegido, siempre de una forma natural, fresca y fácil de leer. Tanto en este primer fragmento optimizado, como en el resto del artículo, tenemos que evitar repeticiones de términos clave.
Y es que, para Google y los usuarios, el contenido es cada vez más el rey, y no es nada natural insistir constantemente en el mismo concepto, o crearemos el efecto contrario.